Pulsera de espinela azul Sri Lanka A+ (bolas 5-6mm)

La espinela es una piedra preciosa que suele confundirse con los zafiros o los rubíes. La espinela es un aluminato de magnesio, coloreado con cromo o hierro. Tiene una formación cristalina cúbica como el diamante. Sin embargo, a diferencia de los diamantes, que tienen una exfoliación perfecta, la espinela tiene una exfoliación pobre, lo que hace que sea más fácil de cortar.

La espinela tiene su origen etimológico en la palabra latina “spina” para espina o “spinula” para espina pequeña debido a la forma de sus cristales. Hay otra etimología que viene del griego “spinther” que se traduce como centelleante o resplandeciente.

La espinela tiene una dureza de 8 en la escala de Mohs, lo que la hace perfecta para su uso en joyería. A modo de comparación, el diamante tiene una dureza de 10, la más alta en esta misma escala. Además, a diferencia de los rubíes y los zafiros, la espinela rara vez se calienta o se trata.

La espinela tiene una gran demanda entre los joyeros, pero se encuentra en cantidades limitadas y a menudo es insuficiente en el mercado. Las espinelas son piedras preciosas de refracción única, como los granates o los diamantes.

La espinela azul es una piedra especial. De hecho, hay pocas piedras de color azul en la naturaleza. El más famoso es el zafiro. Vale la pena señalar que el topacio obtiene su color azul con un tratamiento de irradiación y la tanzanita debe calentarse para volverse azul.

La espinela azul tiene un espectro de colores que va desde el gris azulado hasta el violeta azulado, el azul verdoso y el azul cobalto. Los tonos más claros tienden a tener más brillo y fuego dependiendo del tipo de luz a la que estén expuestos.

Los colores más codiciados de las espinelas son el rojo y el azul. En su mejor calidad de gema, la espinela puede considerarse tan valiosa como el rubí o el zafiro. Así, la espinela azul o la espinela roja despiertan interés entre los joyeros y coleccionistas de lujo. Se puede montar como anillo, pendiente, colgante, etc.

Algunas espinelas talladas en cabujón pueden exhibir un asterismo con una hermosa estrella de 6 puntas visible bajo un rayo de luz.

No existen leyendas ni mitos asociados a esta piedra. La razón es muy sencilla: las espinelas se confundían con rubíes (por los rojos) o con zafiros (por los azules). A menudo se les confundía, de buena o mala fe, con realizaciones reales o eclesiásticas. Lo que explica su ausencia en los textos históricos.

La espinela más famosa es la que adorna la corona de Catalina II de Rusia. Con un peso de unos 400 quilates y un color rojo intenso, actualmente pertenece al tesoro del Kremlin.

Los principales yacimientos de espinelas de alta calidad se encuentran en Birmania, Sri Lanka, África, etc.

La espinela azul tiene muchas virtudes, entre ellas la de calmar el sistema nervioso, el estrés y la ansiedad. Permite entonces identificar la naturaleza de ciertos bloqueos psicológicos, a menudo vinculados a traumas infantiles. Una vez identificados los bloqueos, el usuario puede avanzar, liberarse del pasado, disfrutar del presente y prepararse para el futuro.

La espinela azul es una piedra que favorece la meditación y la conexión con el yo interior. Proporciona elevación espiritual y desarrolla la concentración. Facilita la memorización y está recomendado para estudiantes, personas en formación o reciclaje profesional. Conduce a una mejor asimilación de la información.

La espinela azul desarrolla la seguridad en uno mismo y la confianza. Si el usuario es una persona en medio de un cuestionamiento personal, la espinela azul restaurará su autoestima. Combate la timidez excesiva, los complejos y las dudas. El portador siente bienestar y serenidad. Es una piedra calmante.

Además, la espinela azul actúa sobre los problemas de libido. Es muy recomendable para parejas que llevan mucho tiempo juntas y que están experimentando cierto cansancio. Reaviva el deseo entre los esposos.